Ver a uno de los mejores jugadores del mundo con la nariz ensangrentada por varios minutos no es lo normal. Ocurrió, nada más y nada menos, que a Cristiano Ronaldo, en el partido que Portugal y República Checa estaban disputando en la fase de grupos de la UEFA Nations League.
La televisión mostró que los médicos entraron rápido a la cancha para socorrer al astro portugués, de 37 años, caído en el sueldo tratando de atajar la sangre de la nariz.
La jugada que desembocó en el inesperado accidente era que Ronaldo iba detrás de la pelota cerca del arco contrario. Allí sale el golero, Tomás Vaclik, de República Checa tratando de adelantarse a él, pero su cálculo fue imperfecto. El arquero quiso llegar primero, pero Ronaldo ya estaba ahí. Entonces, Vaclik terminó dándole fuerte golpe en el rostro y la peor parte fue por la nariz.
El conocido como CR7 cayó al piso y se observaba el dolor que le causaba el golpe. Apenas cayó, el árbitro autorizó el ingreso de los médicos y éstos entraron a asistirlo. Se le veía al CR7 preocupante. Todos estaban asustados. Hasta que pasaron los minutos, los médicos lograron parar la sangre y el ídolo terminó con una bandita por la nariz y un apósito en uno de los orificios de la misma.
Ronaldo salió de la cancha para ser asistido. Una vez recuperado regreso al terreno de juego. El árbitro, Srdjan Jovanovic, no aplicó ninguna sanción al arquero porque la jugada estaba invalidada previamente.
El susto fue grande porque apenas corrían los primeros minutos del partido. Eran 12 minutos del primer tiempo, cuando el Estadio Fortuna Arena de Praga quedó murmurando y preguntando qué iba pasar con el astro del fútbol y con el partido en disputa.
Los portugueses visitaron a los checos y jugaron con éstos la quinta fecha del Grupo A2. El partido terminó con el triunfo de Portugal 4-0. Rafael Leao hizo el doblete y celebró sus primeros goles con su selección. Bruno Fernández hizo el tercer gol y Diogo Jota el cuarto.