Eduardo Mingo, titular de la Dirección de Meteorología e Hidrología, explicó en la mañana del miércoles, sobre los recientes eventos climáticos que han impactado a varias regiones del país, específicamente sobre la llamada «lluvia negra». El experto en meteorología, hizo referencia a la lluvia negra, un fenómeno poco común que está relacionado con la presencia de partículas de hollín en la atmósfera, las cuales son arrastradas por el viento y depositadas a través de la lluvia.
El fenómeno de la lluvia negra no es exclusivo de Paraguay, ya que, según el director, recientemente ocurrió en Uruguay debido a las cenizas que provenían de incendios forestales en el Pantanal, Bolivia y el Chaco paraguayo. Mingo explicó en la 1020 AM, que la lluvia no es negra al inicio, sino que las gotas de agua se mezclan con las partículas en suspensión, oscureciéndose mientras descienden hacia la superficie. Esto ha generado preocupación en la población, aunque el titular de Meteorología, señaló que el fenómeno es simplemente un proceso natural de limpieza de la atmósfera.
Sin esperar que sea lluvia negra o blanca, necesitan agua en el Chaco
En cuanto a las expectativas de lluvias para mitigar los incendios en el Chaco, Mingo expresó que aún no se espera una precipitación lo suficientemente significativa para aplacar los focos de fuego. A pesar de que hay algunas señales de lluvias en camino, estas serán insuficientes en cuanto a cantidad y extensión. Se espera una lluvia «tímida» que podría aliviar parcialmente algunas áreas, especialmente en la región oriental del país, pero la situación en el Chaco sigue siendo preocupante.
El director mencionó que la lluvia más intensa podría llegar la próxima semana, trayendo consigo un mayor alivio para las regiones afectadas por el fuego, aunque añadió que esto es incierto, no sa sabe todavía si será suficiente para contrarrestar los focos más importantes. Las lluvias de esta semana comenzarán principalmente en el Sur del país, afectando Misiones, Itapúa, Caazapá, y Guairá. Posteriormente, el fin de semana, podrían extenderse hacia el Norte de la región oriental, alcanzando zonas como Concepción y San Pedro.
A pesar de esta esperanza, la situación en el Chaco continúa siendo crítica. Mingo señaló que las probabilidades de lluvias significativas en esa región son bajas para los siguientes días, aunque se espera que el domingo caigan algunas precipitaciones leves en áreas como Alto Paraguay y el Este de Presidente Hayes. Sin embargo, se necesitarían entre 20 y 50 milímetros de lluvia para ayudar a controlar los incendios, algo que parece poco probable con los montos actuales previstos.
Cambio climático
El cambio climático también fue un tema abordado durante la entrevista, ya que los eventos extremos se están volviendo más frecuentes y severos. Mingo comentó que, aunque las lluvias ayudarán a limpiar la atmósfera, los incendios y la sequía en el Chaco continúan siendo una fuente de preocupación para las autoridades.
Por último, el director mencionó que si bien la lluvia negra puede generar reacciones químicas al combinarse con partículas de combustión, no hay evidencia clara de que sea altamente tóxica para la salud. Sin embargo, reconoció la necesidad de que expertos en química atmosférica evalúen más a fondo el impacto que este tipo de precipitaciones podría tener a largo plazo.
El tiempo hoy: Pronóstico de lluvias y descenso de temperaturas
Fenómeno ya conocido en el país
La última oportunidad que se presentó una lluvia negra en el país, fue aproximadamente hace 15 años, cuando en abril de 2009, un fenómeno de esta naturaleza sorprendió a los pobladores de Asunción y Gran Asunción. En aquel momento, se tenía un panorama idéntico al actual, con muchas quemazones de campo y la probabilidad de tormentas en el horizonte luego de un día caluroso y brumoso como el que sentimos en los últimos días.
El frente frío arrastraba una nube de humo hacia nuestra capital, y las gotas, en lugar de ser transparentes como de costumbre, caían negras debido a los numerosos incendios en la región.
Tal como explicó Mingo, este es un fenómeno poco común y se da en momentos donde la saturación del humo es mucha como lo estamos evidenciando en los últimos días.
