El telescopio espacial James Webb ha detectado signos de posible señales de vida en un exoplaneta denominado K2-18b, que está situado a 124 años luz de la Tierra. Con un 99,7% de certeza, científicos han identificado varios compuestos que en nuestro planeta son producidos exclusivamente por organismos vivos.

Un hallazgo revolucionario
El equipo internacional de astrónomos, liderado por Nikku Madhusudhan de la Universidad de Cambridge, utilizó el poder del telescopio Webb para analizar la atmósfera de este mundo oceánico potencial. Los resultados, publicados en The Astrophysical Journal Letters, muestran:
- Concentraciones de DMS (sulfuro de dimetilo, compuesto orgánico) miles de veces mayores que en la Tierra
- Presencia de metano y dióxido de carbono detectados previamente
- Una firma química consistente con actividad biológica
Debaten sobre temperatura y superficie del K2-18b
K2-18b, con 8 veces la masa terrestre y 2.5 veces su tamaño, orbita en la zona habitable de su estrella. Las características que lo hacen único incluyen:
- Posible superficie oceánica global
- Atmósfera rica en hidrógeno
- Temperaturas que podrían permitir agua líquida
Sin embargo, la comunidad científica mantiene debates intensos. Algunos investigadores, como Raymond Pierrehumbert de Oxford, argumentan que el planeta podría ser demasiado caliente para la vida, sugiriendo océanos de lava en lugar de agua.
Próximos pasos en la búsqueda
Madhusudhan estima que se necesitan entre 16-24 horas adicionales de observación con el telescopio Webb para alcanzar el 99.99994% de certeza requerido para una declaración definitiva. «Este podría ser el punto de inflexión donde respondamos si estamos solos en el universo», afirmó el astrofísico.
Mientras tanto, la comunidad científica mantiene un saludable escepticismo.
LEA TAMBIÉN: Asteroide 2024 YR4 podría impactar contra la Luna en 2032