«Que todo lo hagas en silencio y que tu éxito haga ruido», esta es la frase que Ayelen Alfonso ha comentado que es su preferida, en varios programas que podemos encontrar en Youtube. Aye, la gran triunfadora del reality show de canto de España, Factor X sí que está haciendo ruido con su éxito. Pero, cuidado, es un camino que recién comienza. Hay mucho trecho que andar aún y ese ruido puede silenciar una carrera si no se la conduce correctamente.
Aye es una chica inteligente, como lo ha demostrado en las entrevistas que ha dado en diversos programas, con respuestas acertadas y rápidas. En su paso por Factor X ha sobresalido no solo por su voz sino también por la manera que ha pasado los aprietes del jurado.
A su talento artístico suma su manera de ser desenvuelta con lo que se ha ganado el apoyo del público que fue el que realmente la premió en el concurso. Ha logrado un contrato con la multinacional Universal y es aquí que recién comienza el verdadero desafío. Hoy todos hablan de su triunfo, pero hay que cuidar que dicho logro sea un plataforma de despegue y no una anécdota para rememorar en el futuro.
Debe elegir muy bien su repertorio, tratar de que no sea absorbida por productores que buscan el éxito instantáneo pero efímero. Tampoco puede hacer algo al estilo festivalero paraguayo, como el show que presentó en la Expo el viernes 19, donde cantó desde Bronco a Soda Stereo.
Por un lado es una muestra de su versatilidad, pero por otro es un callejón sin salida que funciona en festivales paraguayos, pero no proporcionan una identidad.
En este camino, Aye pasará a ser una más del montón dentro del espectro de entretenedores locales. Ella es muy joven, debe estudiar repertorio, ensayar o crear nuevas canciones. Pero debe hacerlo rápido, porque es su momento, es la oportunidad que esperaba.
Para alguien de su edad es como un examen de ingreso o un examen crucial en la facultad. No debe perderse en cosas que cualquiera puede hacer.
Ella debe cuidar su imagen y no tomarse fotos con gente que quiere ganar puntos a costa de su fama. Aye tiene que apuntar más lejos. La gente la quiere mucho como se confirmó en el homenaje que le hicieron en Villarrica el domingo 21. Que esto sea una motivación y no un ruido que lleve al trágico oparei.