El obispo del Chaco, Mons. Gabriel Escobar, en el segundo día del novenario a la Virgen de Caacupé, criticó el Plan de Transformación educativa impulsada por el Ministerio de Educación. Hizo una defensa de la familia tradicional y pidió a los políticos que vuelven a candidatarse a cargos, que saquen al país de la miseria y la corrupción.
Mencionó también la preocupación por la violencia en el norte del país y la inseguridad para los productores de la zona amenazados por secuestros y atentados del EPP.
Abogó por el retorno de los secuestrados y expresó su solidaridad con las familias que aguardan el retorno de sus seres queridos mencionando a los secuestrados Oscar Denis, Félix Urbieta y Edelio Morínigo.
“La defensa de nuestras familias cristianas ante la amenaza de querer implantar a través de la Educación Sistemática impartida por el MEC ciertas terminología que esconden el Enfoque Ideológicos: como el género: concepto desde 1995 (género es igual a biología), derechos: donde el Estado es el principal garante. Pérdida de la Patria Potestad, los niños son ciudadanos plenos y globales; inclusión : introducen orientaciones sexuales diversas y la interculturalidad: donde justifican la ideología de género a través de la cultura. Donde cada uno de ellos está contaminada por lo que se le llama ideología de género y la pérdida de la Patria Potestad de los padres que no condicen con nuestros principios de la Constitución Nacional art.49 “De la Protección a la Familia” y el art.54 “Protección al Niño”, dijo el obispo.
Agregó que estas son las preocupaciones donde el Estado y nuestras autoridades nacionales de los tres poderes (legislativo, ejecutivo y judicial) deben velar por los intereses de su pueblo y evitar ser avasallados con nuevos neo-colonialismos que no respetan la realidad de nuestro país, donde grandes agencias internacionales quieren imponernos aquello que debemos que enseñar y creer para recibir sus migajas de ayuda.
“Les recordamos a estas ONG´S que desde el año 1811 el Paraguay es un País libre y soberano y somos los paraguayos lo que decidimos qué enseñar y cómo educar a los hijos de esta nación”, remarcó el prelado.
Recordó que en la última Asamblea de la Conferencia Episcopal Paraguaya, los obispos del Paraguay expresaron su preocupación por el “Plan Nacional de Transformación Educativa” que ha generado confrontaciones y crea inseguridad.
“Creemos que es necesario revisar los procesos educativos llevados por el MEC. Pedimos la aplicación de los principios y valores irrenunciables de nuestra Constitución Nacional, como la dimensión transcendental, la familia, la vida y la dignidad de toda persona”, insistió.
Más adelante señaló que la Iglesia es consciente de la necesidad de una Reforma Educativa sí, es urgente y necesaria, “pero no como lo están planteando transformar todo, sacar todo y traer ideas foráneas que no condicen con nuestra idiosincrasia paraguaya”.
Criticó a los candidatos que promovieron estas iniciativas se están postulando nuevamente a los mismos cargos. “Le decimos a estos señores que hoy el paraguayo ha crecido mucho en civismo y sabe quién está con el pueblo y quienes no. Les pedimos a las personas que se están queriendo candidatar para ocupar distintos puestos en el país, esfuércense en sacar al Paraguay de la miseria, la pobreza y de la corrupción que corroe todos los estamentos del país y por sobre todo de defender los valores de la vida y la familia”, apuntó.
El obispo también se refirió a los compatriotas que por falta de oportunidades tienen que abandonar el país y por sobre todo de aquellos compatriotas que deben deambular de un lugar a otro de nuestro suelo paraguayo en busca de trabajo, de seguridad ante crímenes, asalto en pleno día.
Habló también de la inseguridad que se vive en el norte del país donde organizaciones paramilitares como el EPP (Ejército del Pueblo Paraguayo) y otros no dejan vivir tranquilos a paraguayos que quieren hacer progresar el país a consecuencia del secuestro.
“Desde Caacupé queremos unirnos al dolor de las familias que no saben nada de sus seres queridos y ofrecemos nuestras oraciones para poder tener noticia de nuestros hermanos privados de su libertad o en cautiverio de Oscar Denis, Félix Urbieta y Edelio Morínigo es justicia querer saber dónde están sus seres queridos”, dijo.
Criticó también el intento de censurar a la prensa a través de condenas por la justicia, ya que el cuarto poder que es la prensa se preocupa de salir en defensa de los más pobres y desvalidos de nuestro patria, a consecuencia que nuestras instituciones públicas no hacen su trabajo. “Cuidemos nuestra libertad de expresión en el Paraguay”, dijo el obispo..
En otro momento criticó a la justicia que no cumple con su función. En ese sentido dijo que será que tienen que venir embajadores de otros países a decirnos que tenemos que hacer en nuestra propia nación que es libre y soberana. “Son las
grandes interrogantes que nos hacemos los paraguayos y estamos llamados a la conversión del corazón”.