La grata experiencia de realizar una cobertura periodística del mundial C17 futbol de salón que nos trajo hasta Santa Rita, amén del cumplimiento de una específica misión informativa, sirvió para que pudiéramos conocer mejor, una de las zonas más ricas y prósperas del país, que comenzó a despertar nuestra curiosidad por el asombroso suceso de su Expo anual con miles de visitantes. Regresamos asombrados de lo que vimos y sobre todo del grande y feliz futuro que se vislumbra y la firmeza con la que avanza hacia él.
Santa Rita hoy no es simplemente el punto más destacado, conocido y referente, andando por la ruta Sexta entre Ciudad del Este y Encarnación. Es el núcleo, el corazón, de una vasta y productiva región agrícola del país, con hombres laboriosos y emprendedores, que literalmente trabajan día y noche, al punto de iluminar sus campos para extender las labores agrarias urgentes en horario nocturno, aprovechando al máximo el valioso tesoro que es el tiempo de producción. Es un crisol de culturas de grata y armónica conjunción, con múltiples sonidos derivados de diferentes lenguas, pero una coincidente filosofía de amor al trabajo.
En una creciente comunidad como ésta, el deporte no puede estar ausente. Y es así que vemos verdaderos complejos contiguos a grandes sembradíos, adonde los trabajadores completan la jornada con la sana y reconfortante practica de las bochas, disciplina no solo muy popular sino también muy exitosa, que hizo resaltar a sus figuras en los más altos sitiales, incluso de nivel mundial.
Tienen una forma de vida diferente, centrada en el trabajo, que es el motor que mueve hasta el horario de ingestión de alimentos, tornándose la cena más importante como comida principal del día siempre después de haber completado las actividades laborales diarias, por encima del almuerzo que se convierte en un breve refrigerio, para nada priorizado.
Importantes empresas de Brasil y Paraguay apostaron en el potencial de Santa Rita, hoy emporio en el pais en varios renglones agro-industriales y la han convertido posiblemente en la ciudad que más crece, que se traduce en sucursales de grandes negocios de ambas naciones limítrofes, así como un continuo crecimiento edilicio en un microcentro sumamente activo y con un movimiento comercial sorprendente y ascendente.
Hoy Santa Rita dejó de ser un pueblito sobre una importante ruta. Y el martes mostró al mundo su hermoso polideportivo Municipal y con 2.500 personas llenando su capacidad para ser partícipes de la histórica primera jornada de futbol de salón a nivel internacional.
El fin de semana, se anuncian competencias de tenis, disciplina que empezó a florecer al lado del siempre omnipresente futbol y la precitada particular preminencia de las bochas entre las otras modalidades que se cultivan.
El mundial de futbol de salón fue otra muestra de la incalculable capacidad que tiene el interior en todo emprendimiento deportivo. Toda una acertada del futbol de salón, llevar el mundial C17 a esa zona y plantar bandera en un lugar de inimaginable prometedor futuro.
Hace tiempo que este deporte seis veces campeón mundial, apostó decididamente al interior. Los resultados están a la vista. Ojalá otras disciplinas hagan lo mismo y definitivamente erradiquen el obsoleto concepto que el Paraguay termina en la Avenida Lynch en el que no es sino el limite de la capital y nada mas. Después de ella, está esperando y se está desperdiciando un valioso potencial, muy poco y mal utilizado.
Santa Rita es el actualizado ejemplo y modelo que deberán observar mejor, nuestras distintas modalidades deportivas, como ahora lo acaba de hacer el futbol de salón. Así como la joven y vigorosa población, fundada hace apenas medio siglo, supo agigantarse, posicionarse y proyectarse, todo nuestro deporte y no solo un par de ellos, está en condiciones igualmente de elevarse, siguiendo tan edificante ejemplo.
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