Al menos los resultados parciales de las elecciones de medio mandato de los Estados Unidos señalan que los republicanos no tuvieron una victoria aplastante con una “marea roja” como anunciaban y al contrario hubo una reacción y resistencia de los demócratas, que aunque perderán posiblemente el poder en la Cámara de Representantes, el mensaje del electorado tiene un tono positivo.
Los resultados de estas elecciones son claves para la administración de Joe Biden, como también lo es para el republicano Donald Trump, quien aspira volver a la Casa Blanca. Se renuevan la totalidad de la Cámara de Representantes (435 diputados), un tercio del Senado (34 bancas) y 36 gobernadores.
Los republicanos consiguieron victorias, pero parecen no alcanzar el rechazo generalizado a la administración de Biden.
Las disputas por el gobierno de los estados también fueron claves en estas elecciones y el triunfo aplastante del republicano Ron DeSantis en Florida, debería comenzar a preocupar a Trump, ya que de esta forma DeSantis se consolida como uno de los principales candidatos potenciales a la Casa Blanca en 2024. Tras conocerse los primeros resultados, DeSantis, de 44 años, dijo que apenas está comenzando la lucha.
La subida récord de la inflación fue una de las mayores desventajas de Joe Biden en estas elecciones y esto evidentemente le costará la pérdida del control de la Cámara de Representantes y el Senado. En consecuencia, podría significar trabas para las próximas acciones de su gobierno, además de comprometer seriamente las aspiraciones de los demócratas para el 2024.
Los mismos partidarios de Trump reconocieron que con estas elecciones no tuvieron la gigantesca «ola roja”, el color de los republicanos, que había anunciado el polémico expresidente.
El senador republicano Ted Cruz, quien previamente había pronosticado un «tsunami rojo», se anticipó señalando que su partido podría ganar ambas cámaras pero que «no ha sido una ola tan grande como esperaba».
