Durante el velatorio, los presentes se sorprendieron al darse cuenta de que la bebé respiraba y aún estaba viva, por lo que la trasladaron de urgencia al hospital. Actualmente la criatura se encuentra en cuidados intensivos de un sanatorio privado en Ciudad del Este.
Este llamativo suceso tuvo lugar el viernes en el Hospital Regional de Ciudad del Este. Los médicos llevaron a cabo una intervención quirúrgica de cesárea para salvar la vida de una mujer embarazada en su séptimo mes, cuya vida y la del bebé estaban en grave riesgo.
Tras la operación, alrededor del mediodía, los médicos informaron a los familiares que lamentablemente la bebé no había sobrevivido.
Tras completar los trámites pertinentes, el cuerpo fue entregado a la familia. Ellos se dirigieron al km 14 de Minga Guazú, su lugar de residencia, para llevar a cabo el velorio de la pequeña.
Durante el velatorio, justo treinta minutos antes del entierro, uno de los tíos se acercó para despedirse y se dio cuenta de que la bebé se movía.
Después de confirmar que seguía con vida, la llevaron de inmediato de regreso al hospital, donde la ingresaron en una incubadora. Más tarde, la bebé la trasladaron a un servicio de cuidados intensivos en un sanatorio privado de la zona.
Durante el velatorio
Este incidente sorprendente ocurrió en el Hospital Regional de Ciudad del Este, donde inicialmente se había dado por muerta a la recién nacida. La bebé permaneció en el ataúd durante aproximadamente una hora y media, según relató su padre.
«Nos entregaron al bebé, muerto y todo morado, alrededor de las 13:40. Lo llevamos a la casa de mi mamá para el velorio. Después, cuando mi tío fue a despedirse, notó que la bebé se movía y corrió a avisarnos», relató el padre sobre el momento angustiante.
«No hay explicación, ni culpables. Para nosotros, esto es un testimonio de lo que ocurrió. La llamaremos ‘Milagros de Jesús’, es una niña», expresó la abuela de la bebé.
El padre mencionó que, tras ser internada, pudo ver a la bebé a través de un vidrio y que aparentaba estar estable.
Por otro lado, la médica se excusó de hablar con la prensa, mencionando que estaba ocupada con los trámites de traslado y que posteriormente entregaría un informe detallado al director del hospital sobre lo ocurrido.
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