La experiencia habla que contando desde el mismo día que suben los precios del petróleo en el mundo, a la siguiente semana sube el precio del combustible en nuestro país. Lastimosamente es más difícil que esto ocurra a la inversa. Como por ejemplo hoy que la cotización del crudo bajó a menos de 90 dólares por barril, seguro que no tendrán en cuenta otra remarcada para la siguiente semana.
En el último informe publicado por la Secretaría de Defensa al Consumidor (Sededo), el precio de los carburantes estaban en 9.990 guaraníes el Diesel Tipo I, 8.300 guaraníes el Diesel Tipo II. La nafta de 85 octanos a 8.000 guaraníes, la de 90 octanos a 8.500 guaraníes, la de 95 octanos en 9.690 guaraníes y la de 97 octanos en 11.770 guaraníes. El alcohol se vendía a 6.490 guaraníes, todas medidas en litros en un promedio ya que existía leves variaciones por emblemas.
Ayer miércoles, el precio del crudo a nivel internacional se cotizó en 84 dólares el barril, cayendo así a su mínima cotización desde antes incluso de la invasión rusa a Ucrania, temiendo una recesión mundial, sumado a el brote de Covid-19 en China y sus restricciones y la escala del dólar que se vuelve más fuerte frente al Euro, la moneda de la Comunidad Europea.
A su vez, el Brent del Norte, marcó una pérdida de un 3,18 % hasta los 89,88 dólares el barril, mientras el WTI se desplomó en su mínimo no registrado desde enero con una caída de aproximadamente 3,48 % hasta los 83,86 dólares. En la cotización a futuro del crudo en Nueva York para entrega en octubre, ya marcaban una reducción de 0,84 dólares con respecto al cierre de la sesión anterior.
De momento, es muy probable que sigamos con estos precios hasta que, aprovechados de los mínimos que se dan en el mercado, los emblemas renueven sus tanques, estabilicen las pérdidas registradas por las subas que se sentían a principio de la invasión de Rusia a Ucrania y agoten el tiempo que queda con el stock aún caro que tienen en reserva para que ahí sí se dé algo beneficioso para la ciudadanía.
