En medio de escándalos generados la semana pasada en la cartera de Justicia, que valieron la remoción del último ministro a escasas ocho horas de asumir el cargo, el presidente de la República Mario Abdo Benítez tomó en la fecha el juramento del nuevo secretario de Estado.
Asumió formalmente como nuevo ministro de justicia, Alberto Benítez Romero. En un acto realizado en Palacio de López, el nuevo ministro tomó juramento ante el presidente de la República el lunes en reemplazo de Edgar Taboada, quien nada más cumplió el mismo papel por escasas horas.
Entre sus prioridades, el flamante ministro tendrá que responsabilizarse del contexto de emergencia y reorganizar el sistema penitenciario como encargado de la cartera. En sus primeras palabras ya como ministro, Benítez Romero expresó que será un gran desafío el que asume.
Continuará el legado de sus antecesores y en tal sentido resaltó que en tres meses se podrá contar con la inauguración de tres nuevos recintos penitenciario, los de Emboscada en el departamento de Cordillera y Minga Guazú en Alto Paraná.
Dijo que en el Ministerio de Justicia continuarán los trabajos de clasificación de las personas privadas de libertad que van a estar cumpliendo sus condenas en esos penales que se encuentran en fase de terminación. Tenemos alianzas estratégicas con el Ministerio del Interior, la Senad, el Poder Judicial y vamos a seguir en esa línea, expresó.
Sobre las recomendaciones recibidas por el presidente de la República, Benítez Romero dijo que el mandatario le instruyó mucho compromiso y sobre todo, la mayor entrega para ordenar el sistema penitenciario paraguayo, compuesto por más de 16.500 internos.
Adelantó que trabajará en conjunto con el Poder Judicial para acciones concretas que afecta al 70% de la población penitenciaria que carece de condena y así, reducir la brecha a la par de dotar de herramientas de reinserción para que puedan desarrollar una vida al margen de la delincuencia.
