La sequía, que por dos temporadas consecutivas castigó a todos los productores, podría dar una tregua en la temporada 2022-2023. Esto a consecuencia que tendremos un tiempo de transición de Niña a Niño con condiciones de tiempo normales, con las lluvias justas que beneficiarán al campo, por lo que estiman los expertos en meteorología de la región.
A partir de la presente primavera, los modelos climáticos desarrollados por meteorólogos de Argentina, Uruguay, Brasil y Paraguay, coinciden en que las lluvias caerán en lo justo en la temporada que va hasta el año que viene. Esto debido a que las posibilidades de que ocurra un tercer periodo de la Niña (temporada seca), se debilita y entra en la etapa balanceada de precipitaciones de cara a el Niño (temporada de lluvias).
No obstante, todavía se podría dar con un 10% de probabilidades que nuevamente se repita una temporada de la Niña para la temporada 2022-2023.
Algunas heladas tardías, aún se podrían observar en esta parte de la región, pero su efecto no llegaría hasta los trópicos, por lo que se esperan eventos normales. Ya en el verano se estima que podría notarse en su rango normal y como se observa normalmente al inicio de la estación, se tendrá un lapso seco y cálido que se extenderá por el todo el mes de enero.
En febrero se observarían de nuevo las lluvias de estación, temperaturas moderadas y una regularización del comportamiento climático. Esto se mantendrá a lo largo del otoño del 2023 donde nuevamente se encuentra en un momento de transición.
Volviendo a la actualidad, lo que resta del invierno 2022 continuarán con las perturbaciones en la Región Oriental de Paraguay, el sur de Brasil, en Argentina, el Chaco, la región sur-este de La Pampa y la Mesopotamia y Uruguay continuarán con lluvias moderadas a abundantes que ayudarán a acumular humedad en los suelos.
Por otro lado, Bolivia, el noreste de Argentina, el Chaco paraguayo, oeste del Chaco argentino y el oeste de la región de La Pampa, continuarán mostrando condiciones secas tipo otoño-invernal, aunque se registrarán precipitaciones algo superiores a la normal pero insuficientes para compensar la evapotranspiración de la región.
En la primavera, las lluvias se reactivarán creando una mejora en el caudal de los ríos más caudalosos de la región y las temperaturas se registrarán con un paulatino aumento. El anticiclón formado sobre Brasil, hará que la humedad llegue hasta el interior del Cono Sur y cuanto más se adentra el mes de octubre, las zonas que sufrieron de sequía invernal dejarán de sufrir por el ingreso de la humedad.
El verano 2022-2023 se presenta con lluvias que elevarán el nivel de humedad en el suelo a la normalidad en el este de Paraguay, sur de Brasil, el este del Chaco argentino, la Mesopotamia, centro y este de La Pampa y Uruguay. Al contrario el Chaco paraguayo, oeste del Chaco argentino y el oeste de la región de La Pampa, tendrán un verano con lluvias en niveles normales a superiores.
En resumen, la temporada 2022-2023 se observa como un proceso de transición entre las típicas condiciones severas de la Niña a condiciones más benignas que inclusive podrían notar mejor en la temporada 2023-2024.
