A contramano de lo que se pretende instalar a través de los principales medios de prensa, solo algunos gremios están en desacuerdo con el proyecto de ley que crea la Superintendencia de Jubilaciones.
Las principales centrales sindicales del país que al comienzo presentaban dudas respecto al proyecto, no solamente quedaron conformes sino que rubricaron un documento de acuerdo con el gobierno, tras una productiva mesa de trabajo donde el mismo presidente Santiago Peña se encargó de explicar punto por punto en qué consistía. Esto último también lo hizo el ministro de Economía, Carlos Fernández Valdovinos.
Una publicación del diario Última Hora del 21 de noviembre pasado lleva por título «El gobierno presenta nueva ley de pensiones, tras alcanzar acuerdo» y muestra la fotografía de representantes del gobierno, de la clase trabajadora y del sector patronal, es decir, de los empresarios. En la cabecera, de frente al primer mandatario se puede ver a uno de los históricos dirigentes del sindicalismo paraguayo, Bernardo Rojas, secretario general de la Central Unitaria de Trabajadores Auténtica (CUT-A), probablemente una de las más activas y combativas durante el régimen de Alfredo Stroessner y en el periodo post dictatorial.
«Centrales sindicales, gremios de empresarios y parte del sector de jubilados acordaron ayer con el Gobierno, en Mburuvicha Róga, iniciar el proceso de reforma de la seguridad social en el Paraguay. A excepción de la Corriente Sindical Clasista y de la Unión de Jubilados del Paraguay (que son críticos a la iniciativa), se firmó un acuerdo para impulsar el proyecto para la reforma del sistema previsional», indica un párrafo del citado medio escrito.
Por el sector sindical firmaron el acuerdo los representantes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Central Nacional de Trabajadores (CNT), Central General de Trabajadores (CGT), Caja de Jubilados Bancarios, Asociación Central de Funcionarios Públicos y Docentes Jubilados del Paraguay, entre otros.
En entrevista este fin de semana con un medio del Holding Vierci, el presidente de la República se ratificó en que no dará marcha atrás de este proyecto, pues considera que se trata de una salvaguarda a los fondos jubilatorios, contrario al mensaje negativo que los medios de la oposición pretenden instalar. Señaló además a Pedro Halley de intentar boicotearel proyecto de ley, al no ser tenido en cuenta como miembro del consejo del Instituto de Previsión Social.
Tanto Enrique Duarte, titular de la Unión Industrial Paraguaya (UIP) y el sindicalista Bernardo Rojas coincidieron en que con la ley se preserva el futuro de los trabajadores y de los jubilados y que los fondos estarán bien cuidados.