El Ministerio Público, por medio de los fiscales Diego Arzamendia, Francisco Cabrera y Fabiola Molas presentaron imputación contra los 6 detenidos ayer tras los allanamientos simultáneos desarrollados en los departamentos Central y Alto Paraná. Además, otros 10 detenidos con fines de extradición a Brasil, quedaron a cargo del juez Gustavo Amarilla.
Los primeros procesados luego del Operativo Dakovo, fueron identificados como Paulo César Fines Ventura, imputado por tráfico ilícito de armas, hechos punibles conexos de la Ley de Armas (tentativa, complicidad, organización, dirección, ayuda, incitación, facilitación, financiación, asesoramiento), en calidad de cómplice, alteración de datos, asociación criminal, alteración de datos relevantes para la prueba y denuncia falsa.
Por su parte, Rodolfo Rodrigo Samaniego Lezcano, fue imputado por tráfico ilícito de armas, cómplice, y por hechos punibles conexos de la Ley de Armas en calidad de cómplice y asociación criminal en calidad de autor. Victorino Gómez Paredes por tráfico ilícito de armas y por hechos punibles conexos en calidad de cómplice y asociación criminal como autor.
La lista la engrosa el general (SR) Jorge Antonio Orue Roa, quien fue procesado como autor de tráfico de influencias, en tanto el coronel Bienvenido Santiago Fretes González fue imputado por cohecho pasivo agravado y asociación criminal, el general (SR) Arturo Javier González Ocampo fue procesado por tráfico de influencias y asociación criminal.
Extranjeros detenidos
Los detenidos que cuentan con pedido de extradición al Brasil son: María Mercedes Ocampos, Eliane Marengo, Manuel Antonio Gómez, Arnaldo Cubas, Ángel Flecha, Aldo Cantero, Ricardo Morra, Julio Cubas, Josefina Cuevas y Cinthia Turro.
En este mismo operativo, uno de los más grandes que se desarrollaron sobre el tráfico de armas en el país, involucró a 19 agentes fiscales quienes, junto a agentes especiales de la Senad, encabezaron allanamientos en Central y Alto Paraná. También se realizaron intervenciones simultáneos en Brasil y Estados Unidos, con sus respectivas fuerzas locales.
La intervención tuvo como objetivo principal, desmantelar una red criminal implicada en el tráfico de armas de Europa hacia Paraguay, y desde allí a las facciones criminales de Brasil.
