En las últimas horas, en el Chaco Central llegó una verdadera «bonanza», con una tormenta que, pese a no ser muy intensa, trajo gran alivio a los pobladores de esta zona del país, quienes vienen siendo sufriendo una extensa sequía. A raíz de esto, desde el mes pasado, el Gobierno como método de contingencia a la falta de agua, envió varios camiones cisterna para ayudar a los pobladores chaqueños.
A tempranas horas, pese a que la última alerta meteorológica anunciaba lluvias para el Bajo Chaco, una sorpresiva tormenta se situó sobre el Chaco Central sobre esta madrugada, dejando caer una cantidad de 45 mm. de precipitaciones al ya necesitado suelo. Actualmente, con lo caído ya pueden utilizar para dar de beber a los animales, principal preocupación de los pobladores debido a que muchos de ellos son productores.
Estas nuevas lluvias, volverán a dejar en óptimas condiciones la humedad del suelo y de esta forma prepararlos para nuevas siembras y reactivar los cultivos propios de la zona, atendiendo a que la última vez no se pudo hacer mucho debido a la falta de agua y humedad en el suelo, que pueda acompañar el proceso del campo.
De hecho, en este mes se estaban esperando las primeras precipitaciones en la zona, como efectos propios del fenómeno climático de El Niño, una época marcada por lluvias que traen un gran alivio para los productores.
