Aumenta la bronca en Argentina porque se juntan falta de combustibles y escasez de dólares. Largas filas se pueden verificar solamente en Mar del Plata donde se observan a buques petroleros varados y camioneros queriendo cargar tanque lleno y le dan sólo un cuarto de tanque.
El Ministerio de Economía no puede resolver una crisis fiscal fuera de control. La consecuencia directa afecta al sistema de transporte normal de combustibles y a su vez afecta a todo el resto de la población, porque ya hay Estaciones de Servicios cerrados (Foto: Una Estación de Servicio en Salta) y otros que apenas venden a mínimo volumen a los interesados.
La crisis ya se puede ver en gran parte de la población y hacia el norte es más fuete. La bronca, como dicen los argentinos, sube de tono. Los automovilistas o transportistas no logran conseguir la cantidad de combustibles que necesitan para su movilidad o para su trabajo diario.
Todo esto sucede en las puertas de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Argentina. Además, este país enfrenta no solamente problema de carburantes sino también de gas. La prensa local informa que la escasez de dólares hizo que el YPF no pueda pagar por las importaciones de gas. Argentina está tratando de conseguir un préstamo a través del Fondo Monetario Internacional (FMI), pero como está a puerta de las elecciones, todo está retrasado.
En la tarde de este viernes, el gobierno de Argentina convocó de urgencia a los representantes de los principales operadores de combustibles de este país para resolver la escasez de nafta y gasoil en el mercado del país vecino. El problema se agrava en la zona norte del país y, de rebote, afecta a los paraguayos que suelen ir a comprar en la frontera porque les favorece la diferencia de precios.
La viceministra de Energía de Argentina, Flavia Royón, convocó a los directivos de Axion, YPF, Raizen y Espuma para buscar una solución. Se acordó la importación de 10 barcos de combustibles y la reactivación de las refinerías para afrontar la crisis. La prensa argentina considera que la crisis de combustibles afectará en la opinión de la población en la segunda vuelta electoral.
