Santiago Peña Palacios se convertirá a tempranas horas del martes 15 de agosto en el 52° presidente constitucional del Paraguay. Metódico economista, casado muy joven, con actualmente 44 años y un extenso currículum en su área, lo llevó incluso a trabajar fuera del país para organismos internacionales. Esto y más es parte de su trayectoria y desde las próximas horas, sumará su experiencia como mandatario del Paraguay.
Para hablar de Peña, tenemos que recordar que fue el último candidato del Partido Colorado, junto con Pedro Alliana, en las Elecciones Generales del pasado 30 de abril, donde por el 42% de los votos, se impuso sobre Efraín Alegre de la Concertación de partidos políticos y Paraguayo Cubas del partido Cruzada Nacional. En su discurso de esa misma noche, atribuyó su victoria al pueblo, que con sus votos eligieron el camino de la paz social, del diálogo, de la fraternidad y de la reconciliación nacional.
Vida privada
El nuevo presidente, nació el 16 de noviembre de 1978, tiene 44 años y muy joven, contrajo nupcias con su actual esposa, Leticia Ocampos de su misma edad, con quien tuvo dos hijos. Sin embargo, mucho antes de casarse nació su hijo mayor, Gonzalo. Por cierto, hace pocos días, este último de 25 años, se casó con Serenella Argaña.
Recuerda el nuevo presidente en muchas entrevistas, que su hijo tenía 1 año cuando contrajo matrimonio con Leticia y que su suegra le dio el ultimátum, “que si no se casaba que no vuelva más a la casa”. Santiago y Leticia son padres de Constanza, su hija menor que actualmente tiene 16 años y aún se encuentra en el bachillerato.
Universidad y experiencia laboral
Su formación es de economista, teniendo además título de Master en Políticas Públicas. Sus estudios terciarios lo culmino en la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción y el postgrado en la Universidad Columbia.
El joven Peña, ya con tempranas responsabilidades de jefe de hogar, comenzó a trabajar como funcionario del Banco Central del Paraguay (BCP) entre los años 2000 y 2009, desempeñándose en el Departamento de Estudios Monetarios y Financieros de la Gerencia de Estudios Monetarios y en el Departamento de Operaciones de Mercado Abierto (DOMA).
De allí comenzó su experiencia laboral a nivel internacional, trabajando para al Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington Distrito de Columbia, Estados Unidos, donde prestó servicios en el departamento donde atienden temas africanos. También fue analista del Fondo de Desarrollo Industrial, trabajando para el FMI.
A su vuelta al Paraguay, cumplió funciones en el directorio del BCP, hasta su designación como ministro en el Gobierno de Horacio Cartes, desde el 5 de enero de 2015 hasta el 5 de junio de 2017.
Actividad política
Para llegar a recibir, la banda presidencial, el bastón de mando y jurar como presidente, “Santi”, como es más conocido, primero tuvo que hacer sus primeras armas en la política. Pero no siempre estuvo activo en el Partido Colorado. Primero fue afiliado al Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) desde 1997. En plenas funciones como ministro de Hacienda, de la mano de Horacio Cartes, se afilió al Partido Colorado en 2016.
Su pasado liberal no tuvo mucho de que hablar por su poco activismo, no obstante cuando se afilió al la Asociación Nacional Republicana (ANR), comenzó a ser más activo políticamente. Es así que participó en la primera interna del Partido Colorado en el 2017 como candidato presidenciable, perdiendo en las internas contra el actual presidente Mario Abdo Benítez.
Durante el periodo 2018 a 2022, no se alejó de asuntos económicos, siendo directivo en bancos privados, siempre ligado al grupo Cartes y reactivando como candidato presidenciable del movimiento Honor Colorado para las elecciones internas simultáneas de diciembre de 2022. En esta oportunidad, si se ganó la posibilidad de representar a la ANR para las generales de abril de este año, ganando a la dupla oficialista encabezada por Arnoldo Wiens.
Así, llegó con la chapa de la Lista 1, que se impuso en las elecciones del 30 de abril pasado.
Desafíos como presidente
Peña asumirá con varios compromisos, deberá completar las obras que no terminaron a tiempo en el gobierno de Abdo Benítez. En cuanto a temas viales, quedará en sus manos culminar las obras del puente Héroes del Chaco, el cual unirá Asunción con el Chaco. También en sus manos quedan las obras complementarias del Puente de la Integración para poder habilitar este paso internacional con el Brasil y el segundo puente financiado por la Itaipú sobre la Bioceánica.
Siempre en asuntos viales, deberá completar ya mencionada, ruta Bioceánica en el tramo que llega a la República Argentina vía Pozo Hondo. La ruta PY-19 que llega a Pilar estará pronta para sus primeros meses de trabajo quedando en sus manos habilitarla, además de una parte de la PY-18 en finalización actualmente en la circunvalación de San Juan Nepomuceno.
A nivel de relaciones internacionales, sin ir muy lejos, tiene entre manos el Anexo C de Itaipú, que acaba de cumplir los 50 años y que Brasil ya está esperando a que este termine de acomodarse en el Gobierno para comenzar las negociaciones. Peña tiene la obligación de reivindicar el derecho de nuestro país, algo que no fue hecho a tiempo por su antecesor.
Con Argentina, tal vez con el siguiente Gobierno que podría salir en primera ronda el próximo noviembre, tienen que revisar en el mismo tono que Itaipú con el Brasil, el tratado de Yacyretá con su socio argentino.
Hablando de Argentina, su gobierno tiene que dar garantías a los empresarios paraguayos para evitar el contrabando desde el vecino país, formalizar la economía de las personas que se dedican a los negocios ilícitos, reactivar el mercado interno y mejorar las inversiones extranjeras.
En cuanto a Salud, si bien comenzó mal con una elección equivocada de futuro ministro, esperan que su Gobierno avizore mejoras en el sistema de sanitario en general, un IPS más justo con los asegurados, mayores medicamentos en especial con los que deben tener tratamientos oncológicos entre otras tareas a mejorar en esta área.
Seguridad es un tema que lleva muchas aristas, no debe cometer errores del pasado y afrontar las garantías de la gente en cuanto a seguridad. Las sustancias ilícitas y su combate debe ser mas férreo en su era y ni que decir de sobre asuntos relacionados al crimen organizado, evitando por sobre todo injerencias de ningún tipo en un asunto tan delicado.
Sin dudas, Peña tiene tarea para rato, pero ya depende de su mano firme y sin presiones para que se cumpla aquello de que “vamos a estar mejor”.
Foto: Facebook Santiago Peña