JUEZ Y PARTE, EN EL BANCO CENTRAL DEL PARAGUAY (VIII)
El Banco Central del Paraguay (BCP) se encuentra sumido en un escándalo sin precedentes debido a un caso de graves irregularidades financieras que involucra directamente al presidente de la institución, José Cantero, y al director Fernando Filártiga.
El escándalo estalló con la resolución N.º 7, del 8 de junio pasado, en la que se resuelve sancionar con una fuerte multa la entidad Interfisa Banco y ocho ex directivos de la firma, tras un sumario administrativo.
El sumario se inició el 13 de octubre de 2022 basada en una denuncia presentada por la Superintendencia de Bancos (SIB) en julio de ese mismo año.
En la misma se cuestionó falencias en la exposición de cuentas en el balance, que fue reconocido por el entonces contador del banco. Sin embargo, estos hechos irregulares en la exposición del balance ya datan, según los documentos, desde el 2016 época en que José Cantero se desempeñaba como gerente general de Interfisa, antes de ir al BCP como miembro del directorio y posteriormente como titular de la banca matriz.
El caso ha sido agravado por diversos factores, entre ellos el hecho de que Cantero habría cobrado sumas exorbitantes de dinero por resultados ficticios, los cuales ahora se están juzgando como irregularidades.
Además, el presidente del BCP decidió no apartarse del caso y firmó personalmente la resolución de multa, a pesar de tener un claro interés directo en el asunto, omitiendo su inhibición en el sumario.
Beneficios económimcos sobre resultados ficticios
Según nuestras fuentes, tanto Cantero como Filártiga recibieron millonarias sumas de dinero mientras trabajaban en la entidad ahora sancionada, pero lo más grave es que Cantero se benefició económicamente con millones de guaraníes en gratificaciones y premios por resultados ficticios, producto de prácticas contables irregulares que ocultaban pérdidas.
Posteriormente, Cantero impuso una fuerte multa a la entidad, ignorando que los nuevos accionistas no tenían responsabilidad en las irregularidades cometidas durante su administración.
Fernando Filártiga, es uno de los cuestionados directores del BCP, envuelto también en el escándalo, ya que anteriormente se desempeñaba como asesor legar de Iterfisa Banco y ahora formó parte del equipo que la investigó y sancionó a dicha entidad, autoblanqueándose y dejando impune al Presidente Cantero.
Filártiga, es señalado como el principal responsable de la «politización» del BCP y de la crisis institucional que atraviesa actualmente la entidad. Fuentes internas del BCP indican que Filártiga ejerce un control absoluto sobre el banco y que aspiraba a convertirse en presidente bajo el nuevo gobierno.
El papel de la Superintendencia de Bancos también ha sido cuestionado, especialmente el del superintendente Hernán Colmán, quien ha estado al frente de la supervisión del sistema financiero durante diez años, período en el que se han producido numerosas irregularidades y quiebras de entidades financieras, como el caso de Aras de Finanzas y CEFISA. A pesar de estos hechos, Colmán permanece en su cargo debido a su cercanía con el gobierno, lo que ha generado sospechas sobre su gestión.
Intencionalmente se habría esperado hasta el 2022 para iniciar el sumario, aguardando que prescriba el periodo que corresponde a la gestión de Cantero. Los demás integrantes del Directorio del BCP, habrían sido advertidos de la gravedad del caso e inclusive habrían solicitado ya una auditoría que les informe los motivos por los cuales la Superintendencia decidió «excluir» a Cantero de la investigación.
Según fuentes internas del BCP, se habría desatado una dura crisis al interior del Directorio, dada
la desconfianza de los directores con respecto a Cantero y a Filártiga, quienes habrían
orquestado la multa al banco Interfisa, del cual ellos mismos formaban parte hace unos años, Cantero en calidad de Gerente General y el Filártiga en calidad de abogado.
Profunda crisis interna
Otros involucrados en el escándalo son Julio Cristaldo, inspector de la Superintendencia de Bancos que tenía a su cargo la fiscalización de la entidad sumariada y Antonella Torio, Gerente de la Superintendencia de Bancos que habría blanqueado al Presidente de graves hechos ilícitos cometidos.
El escándalo en el BCP ha generado una profunda crisis interna y ha puesto en tela de juicio la integridad de la institución. El presidente José Cantero y el director Fernando Filártiga se encuentran implicados en graves irregularidades financieras, lo que ha desatado fuertes tensiones dentro del Directorio del banco.
El escándalo en el BCP ha generado una gran indignación y preocupación en la opinión pública, así como en el sector financiero y empresarial. Se espera que las autoridades tomen medidas firmes y efectivas para investigar y sancionar cualquier irregularidad, a fin de restaurar la confianza y garantizar la estabilidad y la integridad del sistema financiero.
