Parece exagerada la postergación de un juicio contra el usurero, Ramón González Daher, por falsa denuncia; pero es la verdad: el juicio oral en este caso pasó a diciembre. No es la primera vez que se posterga y hubo variedad de excusas: ahora, por segunda vez, la excusa es del propio Tribunal «por recargo de trabajo».
Este caso trata de Ramón González Daher como acusado de haber hecho una denuncia contra una persona con quien hacía negocios. El usurero luqueño -según la acusación- le amenazó a su ex amigo que le iba «fundir» si no le pagaba una deuda, que ya se pagó todo.
El afectado hizo la demanda por denuncia falsa y extorsión. Según la historia, el juicio oral tenía que hacerse el 27 de abril pasado; pero González Daher, dio parte de enfermo y el juicio no se hizo.
Se fijó una nueva fecha que fue el 31 de mayo. Para esa ocasión, los jueces, Elio Ovelar ( que ya se jubiló), María Luz Martínez y Darío Báez fundamentaron «recarga de trabajo» y de nuevo se suspendió el juicio oral.
Hoy tenía que hacerse el juicio oral. Otra vez se suspendió «por recarga de trabajo» y el juicio ya fue al fondo de 2023, a fin de año; quedó para 11 y 12 de diciembre.
No hay apuro, total González Daher ya está en prisión por lavado de dinero y usura. No obstante, es un hecho llamativo la seguidilla de postergaciones.
LA DENUNCIA
La denuncia fue hecha por Salvador Aquino, que declaró haber sido víctima de usura y que González Daher hizo en su contra una falsa denuncia. Hay un interés de González Daher de cobrarle más de 46 millones de guaraníes, lo que Aquino dice que se trata de deuda ya cancelada.
A su vez, González Daher dice que hay un proyecto que él financió para Aquino, lo cual éste niega categóricamente. Entonces, Aquino demanda a González Daher por falsa denuncia.
La Fiscalía sostiene que no hay pruebas de lo que dice González Daher y, por lo tanto, acusa también a éste de haber hecho falsa denuncia. Sin embargo, por este año, prácticamente hay un «descanso» hasta diciembre y el caso queda en «freezer».
