La difícil situación económica generada por la pandemia del COVID-19 continúa afectando a numerosas familias paraguayas que luchan por recuperarse de sus consecuencias. En medio de esta aguda crisis, uno de los problemas más apremiantes para los hogares es el pago de las facturas de energía eléctrica, que se han acumulado sin poder ser saldadas.
La Administración Nacional de Electricidad (ANDE) ha implementado varias campañas para lograr que sus usuarios se pongan al día, pero las cifras de morosos siguen siendo elevadas y ahora nuevamente amenaza con cortar el servicio por facturas impagas acumuladas, en un momento especialmente crítico: una ola de frío que se cierne sobre el país.
La ANDE ha dado inicio este lunes a un operativo de suspensión del servicio eléctrico en la ciudad de Mariano Roque Alonso. Esta medida tiene como objetivo principal regularizar las facturas pendientes de pago y, a su vez, reducir las pérdidas eléctricas ocasionadas por las conexiones clandestinas que se han detectado. Según las autoridades de la institución, este operativo busca no solo recuperar la cartera morosa de la institución, sino también regularizar las conexiones clandestina que proliferan en diferentes zonas.
Una de las novedades de este operativo es la instalación de un Centro de Atención al Cliente en el polideportivo de la Municipalidad de Mariano Roque Alonso. En este lugar, los clientes podrán abonar sus facturas y obtener una reconexión inmediata. Se estima que se ejecutarán alrededor de 400 órdenes de corte por día en dicho municipio, lo que demuestra la magnitud de la cantidad de familias que se encuentran en mora.
Este operativo continuará en otras ciudades del departamento Central y del país, con el fin de abordar la problemática de la morosidad y las conexiones ilegales en todo el territorio, según autoridades.
La ANDE hace un llamado urgente a todos sus clientes para que regularicen su situación antes de que se produzca el corte del servicio eléctrico. Además, se les invita a aprovechar los beneficios de la Promoción Brillante Oportunidad, que estará vigente hasta el 30 de junio, con el objetivo de facilitar el proceso de regularización.
La difícil situación que atraviesan las familias paraguayas, sumada a las bajas temperaturas que se están experimentando debido a una ola de frío, agrava aún más la crisis que enfrentan. Las facturas impagas de energía eléctrica representan solo una muestra de las dificultades que tienen las familias para hacer frente a sus obligaciones financieras.
La pandemia del COVID-19 ha dejado secuelas económicas devastadoras en todo el mundo, y Paraguay no ha sido la excepción. Muchos hogares han visto disminuir sus ingresos o han perdido sus fuentes de empleo, lo que ha generado una situación de precariedad financiera que dificulta el cumplimiento de sus responsabilidades, incluyendo el pago de los servicios básicos como la electricidad.