En una acción conjunta casi sin descanso, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) por nuestro país y la Policía Federal del Brasil llevaron a cabo el operativo «Nueva Alianza 48″, logrando en siete días la incautación y destrucción de 656 toneladas de marihuana.
Este golpe representó un lucro cesante de USD 19,6 millones para las estructuras criminales que operan en la frontera entre ambos países y cuyo valor final podría ser mayor una vez que el producto ilegal llega a destinos más alejados.
Incursiones de la Senad en Amambay
Durante las incursiones en zonas boscosas del departamento de Amambay, específicamente en las localidades de San Luís, Santa Clara y Ñú Vera, las fuerzas de seguridad desmantelaron 35 campamentos utilizados para la producción y procesamiento de la droga. Además, se erradicaron 215 hectáreas de plantaciones de cannabis, una superficie equivalente a nueve veces el tamaño del parque Ñu Guasu.
También se incautaron de 2.400 kilogramos de marihuana lista para su distribución y 70 kilogramos de semillas, según informó la Senad.
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Senad y Policía Federal: convenio
El operativo «Nueva Alianza» es fruto de un convenio de cooperación vigente entre la Senad y la Policía Federal del Brasil, que apunta a anular centros de producción y grandes volúmenes de marihuana en territorio nacional.
Estas operaciones conjuntas, que cuentan con el apoyo del Ministerio Público, el Comando de Defensa Interna de la Fuerza de Tarea Conjunta (Codi-FTC) y el Grupo de Helicópteros de la Fuerza Aérea Paraguaya (FAP), se han consolidado como una estrategia efectiva en la lucha contra el narcotráfico en la región.
La operación «Nueva Alianza» es considerada a nivel mundial como la mayor acción operativa contra el narcotráfico, teniendo en cuenta el volumen de marihuana eliminado en poco tiempo.
Este tipo de operaciones no solo busca desarticular las estructuras criminales dedicadas al narcotráfico, sino también enviar un mensaje contundente sobre la cooperación internacional en la lucha contra el crimen organizado.
Las autoridades paraguayas y brasileñas han reafirmado su compromiso de continuar trabajando conjuntamente para combatir el narcotráfico y garantizar la seguridad en la región fronteriza.
El éxito de esta operación refleja la importancia de la colaboración entre países vecinos en la lucha contra el crimen transnacional y destaca la eficacia de las estrategias implementadas para erradicar el cultivo y tráfico de drogas en la región.
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