Enrique Riera es el primer ministro designado por el presidente electo Santiago Peña. Desde el 15 de agosto liderará el Ministerio del Interior. No solo debe coordinar la prevención de la delincuencia, además debe controlar la acción policial y colaborar en la gobernabilidad del nuevo Gobierno, cuyo mandato va hasta 2028.
No es el primer cargo que ocupará Riera. Se supone entonces que ya conoce los vericuetos de la función pública. Su misión debe centrarse en proponer y poner en ejecución las políticas públicas relativas a Seguridad Interna, Asuntos Políticos, Población, Migración y Repatriación de Connacionales, en coordinación con los organismos competentes.
Observando sus deberes, no es poca cosa lo que tiene encima. De hecho, es el brazo político de Peña y, como tal, tiene que garantizar la gobernabilidad democrática a través del fortalecimiento de la calidad y capacidad de gestión de los gobiernos municipales y departamentales. Es decir, debe ser activo para intervenir, incluso, ante situaciones de conflicto, denuncias o irregularidades.
La seguridad interna es un déficit hoy en el país, que comienza con la escasa credibilidad de la Policía Nacional. A eso debe agregarse el aumento de todo tipo de robos, asaltos y crímenes que suceden en la vida cotidiana. El Ministerio del Interior debe recuperar la imagen confiable, que solo será posible con una gestión eficiente.
Riera tiene que rodearse de personas íntegras. Debe mostrar con hechos la intención de brindar seguridad al ciudadano de a pie y al que está rodeado de la mejor tecnología, previniendo su cuidado personal y familiar. Para eso, guste o no, necesariamente debe tener un equipo altamente calificado, comprometido con los valores éticos y la conducta correcta y honesta.
Desde La Tribuna esperamos que le vaya bien al designado secretario de Estado. Paraguay requiere, con urgencia, instituciones que sean garantes de la gobernabilidad democrática y que cuiden y protejan la seguridad ciudadana. Premisas que son obligaciones básicas del Ministerio del Interior, y que desde el 15 de agosto próximo serán deberes que debe cumplir con eficacia Enrique Riera.