Los ganaderos de Estados Unidos de América bajaron el pulgar a la carne paraguaya. Ellos expresaron a sus autoridades que no es conveniente importar esta carne porque sería perjudicial para el gremio e hicieron, de paso, otras críticas. Foto: «De frente al Campo».
La Asociación de Ganaderos de los Estados Unidos se opuso a la propuesta del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de los EE.UU. que busca modificar la regulación para dar cabida a la importación de la carne paraguaya.
El gremio norteamericano sostiene que si su país realiza la importación, sus asociados perderían alrededor de 12 millones a 23 millones cada año.
Pese a que Paraguay es un país libre de aftosa desde hace 10 años, los ganaderos dicen que nadie puede asegurar que comprando carne paraguaya no haya entre ellos reces infectados con aftosa.
“Abrir nuestras fronteras al comercio arriesgado es una apuesta en la que no estoy dispuesto a apostar”, expresó el presidente de la Asociación de Ganaderos de EE.UU., Justin Tupper. Agregó que EE.UU. está libre de fiebre aftosa desde 1929 y que un brote de la enfermedad devastaría al país.
Informe de SENACSA
Paralelamente, la SENACSA hizo una comparación de las ventas de carne paraguaya con el año pasado y concluyó que hay una caída del 10%, de enero a mayo en la recaudación. En 2022 se recaudó por exportación de carne 683 millones de dólares en los primeros cinco meses y en el 2023 solamente 612 millones de dólares en el mismo tiempo.
La mencionada institución informó que Chile sigue siendo el principal comprador de la carne paraguaya, con el 41% del total embarcado por año. Le sigue Taiwán con el 13% de las exportaciones. El tercer país comprador es Rusia con 8,9% y el cuarto es Brasil con 8,6%.