El reciente juramento de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela ha desatado una ola de críticas internacionales y tensiones internas que mantienen al país divido y en un estado de alerta. Mientras organizaciones como el G7 condenan la falta de legitimidad democrática del proceso, la ONG Foro Penal denuncia un incremento de detenciones políticas en los días previos al acto oficial.
Comunidad internacional no permanece indiferente
75 arrestos se dieron por motivos políticos, según reportó el Foro Penal, entre el 1 y 11 de enero, entre ellos Enrique Márquez y familiares de Edmundo González, días previos a eventos clave.
Los ministros de exteriores del G7 calificaron el proceso como carente de legitimidad democrática, mientras que el expresidente colombiano Álvaro Uribe sugirió una intervención militar internacional para frenar al régimen.
La crítica del Gobierno de Maduro sobre Machado
La líder opositora María Corina Machado también ha sido foco de controversia dentro del país. El gobierno de Maduro lo calificó como un “show mediático”, negando haber sido partícipe. El ministro de Interior y Justicia, Diosdado Cabello, aseguró:
“Está loca porque nosotros la capturemos. Esto no es más que un intento de causar alarma en la población”.
Cabello también tildó de fracaso la manifestación convocada por Machado antes de la toma de posesión de Maduro y aseguró que la opositora enfrenta cargos por terrorismo y usurpación de funciones.
Cabello da un mensaje a la oposición
En un acto reciente, Diosdado Cabello instó a la oposición a reconocer a Maduro como presidente legítimo y unirse al gobierno para trabajar en beneficio del país:
“Deberían comenzar a reconocer que el presidente es Nicolás Maduro y venir a trabajar con nosotros por la patria y nuestro país”.
Durante su discurso, criticó la falta de unidad en la oposición y el oportunismo de algunos influencers que, según él, buscan sacar «provecho económico» de la situación del país.
Un país dividido y en alerta
La situación en Venezuela se convierte en una tensión constante, el gobierno que refuerza los controles. Las críticas internacionales y los conflictos internos hace que la población no encuentre un rumbo.
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