El fiscal Federico Leguizamón proporcionó detalles preliminares sobre un caso de secuestro en San Lorenzo, que tuvo como objetivo a la empresa transportadora de caudales Britimp. En este hecho, delincuentes armados retuvieron a tres personas —dos gerentes y un funcionario de monitoreo— mientras buscaban acceder a información sensible y a las instalaciones de alta seguridad de la compañía. Además, tomaron como rehén a la esposa de uno de los gerentes.
El incidente comenzó en la zona de San Lorenzo con el secuestro de los gerentes Pedro Santiago Barrios Ruiz y su esposa Emilia Marina Sánchez de Barrios. Posteriormente, los captores trasladaron a las víctimas a las oficinas de monitoreo de Britimp, ubicadas en la avenida Mariscal López, en Asunción.
Según el relato del alto funcionario del Ministerio Público, los delincuentes intentaron forzar su entrada a través del sistema de doble bloqueo que protege las bóvedas de la empresa. Lograron pasar el primer portón, pero al encontrar el segundo cerrado por protocolos de seguridad, reaccionaron disparando armas de fuego.
La acción rápida de los sistemas de seguridad internos y la alerta al 911 activaron la reacción de los agentes de la empresa, obligando a los secuestradores a retroceder. Los atacantes huyeron en tres vehículos, dejando tras de sí evidencias del enfrentamiento armado. A pesar de la situación tensa, las víctimas fueron liberadas posteriormente sin lesiones graves. Los delincuentes abandonaron a la esposa del gerente en otra ubicación de la Zona Norte de Fernando de la Mora.
Detalles en investigación del secuestro extorsivo
El fiscal Leguizamón destacó que los captores estaban vestidos con uniformes camuflados, chalecos y pasamontañas, simulando ser policías. Esto permitió que el grupo ganara acceso inicial sin levantar sospechas.
Además, mencionó que la intención principal del grupo parecía ser acceder a las bóvedas de la empresa para un posible robo de gran escala. Sin embargo, las medidas de seguridad frustraron ese objetivo.
Las autoridades realizaron allanamientos en las oficinas de monitoreo de Britimp en el barrio Carmelitas y en la avenida Mariscal López para recoger evidencia.
Aún no se ha determinado el orden exacto de los eventos entre San Lorenzo y las oficinas de Asunción, pero se confirma que los secuestradores trasladaron a las víctimas a múltiples puntos durante el secuestro. Las investigaciones están en una etapa inicial, y se espera que las declaraciones de los afectados arrojen más luz sobre el caso.
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