El Banco Central del Paraguay (BCP) presentó su informe sobre la inflación al mes pasado, revelando una tasa mensual del 0,2%. Este dato muestra una mejora frente al 0,5% registrado en el mismo mes del año anterior, lo que puede ser interpretado como un indicativo de cierta estabilidad en el contexto inflacionario del país.
Sin embargo, al examinar la inflación acumulada hasta la fecha, se observa un incremento del 2,9%, que supera el 2,5% del mismo periodo en 2023. Esto plantea un panorama mixto, donde la inflación acumulada sigue en ascenso, a pesar de la ligera reducción mensual.
En términos de inflación interanual, la cifra se situó en 4,1%, lo que representa una disminución respecto al 4,3% registrado en agosto. Sin embargo, esta tasa es superior al 3,5% que se reportó en septiembre de 2023, lo que podría generar preocupaciones sobre la tendencia general de la inflación en el país.
Inflación núcleo del mes pasado
La inflación núcleo, que excluye los precios más volátiles y se considera un indicador más estable, se mantuvo en 0,2% durante septiembre. Su variación interanual se estableció en 3,1%, que es inferior al 3,3% registrado en agosto y al 3,9% de septiembre del año anterior. Esto sugiere una posible desaceleración en los precios subyacentes, lo cual podría ser positivo para la economía en general.
Por otro lado, la inflación subyacente, que excluye frutas, verduras y algunos servicios tarifados, mostró un incremento del 0,3% en septiembre, superior al aumento de la inflación total. En términos interanuales, la inflación subyacente se situó en 3,3%, mientras que la medida que también excluye ciertos combustibles, conocida como inflación subyacente, marcó un 4,1%. Este comportamiento sugiere que los precios de algunos bienes y servicios más estables están aumentando, lo que podría impactar el costo de vida de los ciudadanos.
Se siente en la canasta básica
El informe del BCP destacó que la inflación del mes se caracterizó por incrementos en varias agrupaciones de la canasta básica. Los bienes durables importados, como automóviles, teléfonos móviles, equipos de sonido y electrodomésticos, experimentaron aumentos significativos. Estos incrementos están influenciados en gran medida por el tipo de cambio del guaraní frente al dólar estadounidense, lo que puede resultar en un desafío adicional para los consumidores que dependen de estos productos.
En el sector de servicios, se registraron aumentos en precios de cuidado personal, alojamiento en hoteles, alquiler de viviendas y servicios de limpieza. Esto podría impactar negativamente el presupuesto familiar, ya que los precios más altos en estos servicios afectan directamente a los gastos diarios de los consumidores.
Sin embargo, estos aumentos también pueden reflejar una recuperación en la demanda, lo que podría ser un signo positivo para el crecimiento económico del país.
En el ámbito alimentario, se observó un aumento en el precio de la carne vacuna, atribuido a un menor ritmo de faenamiento en agosto que resultó en una oferta reducida.
A pesar de esto, el informe también menciona que hubo disminuciones en los precios de hortalizas, tubérculos, productos lácteos y carne de aves. Estas reducciones se deben a una mayor oferta interna, lo que puede ofrecer un alivio a los consumidores que buscan productos más asequibles en el mercado.
Otros productos
Adicionalmente, el documento menciona aumentos en otros bienes de la canasta básica, tales como prendas de vestir, calzado y artículos de limpieza. Esto sugiere que, aunque algunos sectores están viendo incrementos en los precios, otros están experimentando un crecimiento en sus costos, lo que podría generar tensiones en el presupuesto de las familias.
En la última parte, ya mencionando lo que es el sector energético, se registraron leves aumentos en los precios del gas licuado de uso doméstico y el carbón. Estos incrementos, aunque menores, contribuyen a la percepción general de que el costo de vida está en aumento, afectando a los hogares en su capacidad para gestionar sus finanzas.
En conclusión, el informe del Banco Central del Paraguay presenta un panorama inflacionario complejo y mixto. Por un lado, se observan incrementos en los precios de diversos bienes y servicios que pueden representar desafíos para los consumidores; por otro, las disminuciones en algunos productos alimentarios ofrecen un respiro en medio de un contexto económico fluctuante. La interacción de estos factores resalta la importancia de seguir monitoreando la inflación y sus efectos en la vida cotidiana de los paraguayos.