Este lunes por la mañana, Eduardo Mingo, director de la Dirección de Meteorología e Hidrología (DMH), informó sobre una preocupante actualización respecto a los niveles del río Paraguay, confirmando un nuevo récord negativo. El experto meteorólogo, destacó que el puerto de Asunción registró una marca de 1.24 metros bajo cero, con un retroceso con respecto al menos 1.17 metros de la jornada anterior, cifra que refleja una tendencia alarmante de bajante en la cuenca del río y que afecta a gran parte de su recorrido.
Explicó que esta situación crítica no es aislada. “La tendencia es la misma a la baja en prácticamente toda la cuenca del río Paraguay”, afirmó, que actualmente se nota la ausencia de señales de lluvias que puedan ofrecer un alivio a la situación. Las condiciones actuales en la cuenca media y baja se caracterizan por una sequía prolongada, lo que también ha contribuido a la proliferación de incendios forestales en la región, complicando aún más el panorama por la sequía.
El director recordó que, a pesar de que se pueden producir eventos de lluvia localizados, estos generalmente ofrecen aumentos temporales en el nivel del río que aún así pueden generar otro nuevo récord negativo.
“Esos aumentos son parciales y efímeros, a veces apenas suben siete o diez centímetros, y rápidamente vuelven a bajar”, explicó. En este sentido, Mingo hizo hincapié en el último valor más bajo de este año, que se registró el 19 de septiembre, cuando el río alcanzó 1.14 metros negativos.
Se puede dar otro récord negativo
Durante la entrevista, Mingo destacó que el 2024 ya ha marcado hitos preocupantes. A diferencia del año anterior, en el que el nivel más bajo fue de 0.75 metros negativos en octubre, este año muestra una tendencia aún más alarmante en septiembre. “Estamos viendo quiebres de récords que no habíamos anticipado”, comentó, enfatizando que no hay señales de un repunte importante de lluvias en el horizonte.
Sin embargo, Mingo también mencionó que se espera un evento de precipitaciones entre el miércoles y jueves de esa semana.
“La atmósfera está reconociendo que ya estamos en primavera, y eso suele traer lluvias”, indicó el experto.
Aunque estas lluvias podrían generar un repunte en los niveles del río, el director subrayó la importancia de la distribución espacial y la cantidad de agua que se reciba, ya que no todas las lluvias significan un alivio real.
“Normalmente, se genera ansiedad cuando hablamos de probabilidad de lluvia alta, pero no todas las lluvias traen cantidades significativas que puedan recuperar la condición del río”, advirtió. En este contexto, Mingo se refirió a las lluvias recientes que, aunque lograron elevar temporalmente el nivel del agua en unos 8 o 10 centímetros, no fueron suficientes para revertir la tendencia a la baja que persiste.
Evento preocupante para las autoridades
Asimismo, mencionó que hay un trabajo conjunto con diversas instituciones, incluidas mesas técnicas y la Universidad Nacional de Asunción, para monitorizar el caudal del río y tomar medidas adecuadas. “Estamos haciendo un trabajo operativo para medir en puntos específicos y asegurarnos de que estamos al tanto de estos mínimos históricos”, añadió Mingo.
La situación del río Paraguay no solo afecta el ecosistema, sino también la navegación. Mingo indicó que las barcazas están operando actualmente a solo un 60% de su capacidad, lo que representa un desafío para el sector naviero. “Se están haciendo esfuerzos para mantener la navegación al mínimo posible”, dijo, reconociendo que la situación es complicada.
Con el nuevo récord negativo del río Paraguay y la inminente llegada de nuevas precipitaciones, el panorama sigue siendo incierto. Mingo concluyó la entrevista con un llamado a la vigilancia continua, ya que las condiciones climáticas podrían cambiar en cualquier momento, afectando tanto al ecosistema como a la actividad económica de la región.
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