Históricamente, el cine de terror ha sido el género que ha salvado a la industria cinematográfica en múltiples ocasiones. Desde la era del cine mudo, pasando por el colapso del sistema de estudios y la aparición del cine clase B —que produjo principalmente películas de ciencia ficción y terror— hasta la época pandémica, donde las primeras películas que se estrenaron en cines, tras el bloqueo y el aislamiento obligatorio, fueron pequeñas producciones de terror independiente que ni siquiera estaban destinadas a la gran pantalla En la actualidad estamos asistiendo a un renacer del cine de terror.

El fenómeno del género llevó a que los adolescentes, aquellos menos temerosos del virus, llenaran masivamente las salas de cine en busca de su dosis de sangriento celuloide.

El terror, el género más rentable del cine global

En la actualidad, el cine de terror goza de buena salud a nivel global y se erige como el género más rentable de la cinematografía mundial, superando incluso a las películas de superhéroes y familiares. Nadie puede competir con la rentabilidad de una buena película —o incluso una mala— de terror.

Unite al canal de La Tribuna en Whatsapp

Un ejemplo claro de la vitalidad del género es el caso de «Milk & Serial» (2024), una película de terror de metraje encontrado dirigida por Barker, que se ha convertido en un fenómeno en las plataformas digitales.

Esta película, hecha con solo $800, es un testimonio del poder del cine de terror para atraer y retener a las audiencias, a pesar de sus limitaciones de presupuesto. Barker, junto con su socio de comedia Cooper Tomlinson, optó por lanzar la película directamente en YouTube, una decisión que podría haber sido considerada arriesgada, pero que en última instancia ha permitido a «Milk & Serial» alcanzar más de 323,000 visualizaciones y generar una considerable discusión en comunidades de fanáticos del terror como Reddit, YouTube y #HorrorTok.

Adaptación y creatividad: claves del éxito en la era digital

Esta estrategia de distribución no convencional refleja cómo el cine de terror ha sabido adaptarse a las nuevas realidades del mercado, utilizando plataformas digitales para sortear las barreras tradicionales de distribución y llegar directamente a su público objetivo.

La fascinación por el cine de terror no se detiene en su capacidad para generar ingresos; también radica en su habilidad para explorar los miedos más profundos del ser humano.

Desde los miedos atávicos a la oscuridad, la muerte y lo desconocido, hasta la desorientación y la soledad, el buen cine de terror toca estas fibras sensibles y garantiza una experiencia inmersiva que difícilmente se olvida.

Barker, al igual que otros cineastas de terror independientes, entiende esta dinámica. En «Milk & Serial», no solo explora estos temas, sino que también juega con las expectativas del público, manteniéndolos al borde de sus asientos.

La película se presenta como un metraje encontrado, un formato que ha demostrado ser altamente efectivo en el género de terror, desde «The Blair Witch Project» (1999) hasta «Actividad Paranormal» (2007). Este enfoque permite a los cineastas como Barker experimentar con el ritmo y la narrativa, como él mismo menciona: «Justo antes de publicarla en YouTube, recorté 20 minutos solo para que se sintiera más rápida. Siempre he sido editor y estaba viéndola y pensé, ‘Oh, este ritmo, hagámoslo más rápido.’»

Además, el cine de terror ha sabido reinventarse para mantenerse relevante a lo largo de los años, reflejando las ansiedades sociales y los miedos contemporáneos.

El terror como espejo distorsionado de la realidad

En tiempos de incertidumbre global, el terror ofrece un espejo distorsionado de la realidad que permite al espectador confrontar sus peores pesadillas en un entorno seguro.

Películas como «No entres» de Hugo Cardozo o «The Chair» de Barker, que se convirtió en un corto viral con más de 5.5 millones de vistas en YouTube, muestran cómo el género puede aprovechar las plataformas digitales para expandir su alcance y capturar nuevas audiencias.

Esta tendencia subraya un cambio en el consumo de contenidos de terror, donde la inmediatez y la accesibilidad son claves para captar la atención del espectador moderno.

El éxito del cine de terror no solo se mide en términos de taquilla, sino también en la forma en que resuena emocionalmente con los espectadores.

Este género no solo se enfrenta a nuestros miedos internos, sino que también ofrece una forma de catarsis, una liberación de emociones acumuladas que puede ser tanto aterradora como terapéutica.

Como Barker comenta sobre la recepción de su película: «Las personas que se dedican a reseñar películas están reseñando esta película, algo que no harían para un corto. Pero de repente estás viendo videos que discuten tanto ‘Alien: Romulus’ (2024) como ‘Milk & Serial’.» Esto demuestra cómo una buena historia de terror, independientemente de su formato o presupuesto, puede capturar la imaginación del público y mantenerse en el centro de la conversación cultural.

Hugo Cardozo: el maestro del terror paraguayo regresa con «No Entres»

Actualmente, en la cartelera local, podemos disfrutar de una película como “No entres” (2019) de Hugo Cardozo, quien hace varios años se convirtió en un referente mundial dentro del universo del terror con su efectiva “Morgue”, que no solo debutó en primer lugar en su primera semana, con 22.943 espectadores en 36 pantallas de estreno, dejando a la también debutante «Once Upon a Time in Hollywood» (2019) en segundo lugar, sino que se convirtió en la película paraguaya más vendida internacionalmente de la historia.

Con “No entres”, Cardozo vuelve a utilizar la fórmula de asustar con lo que se esconde en las sombras, implicando al espectador en un rol activo que contribuye a construir el clima que lo hará saltar de su butaca con cada jumpscare, efectivamente dosificado a lo largo de los 100 minutos que dura la obra.

Solo basta asistir a alguna de sus funciones para ver cómo se replican los saltos en las butacas y cómo las manos sudadas y temblorosas son el síntoma más común entre aquellos valientes que se quedan hasta el final de los créditos.

Cardozo, más allá de no haber asistido a una escuela de cine, conoce a sus fanáticos como el más experimentado analista de taquilla internacional. No solo evita sobreanalizar sus proyectos, sino que, con la simpleza de un artesano, prepara el mecanismo para su festín de horror más clásico, y los espectadores disfrutan del banquete con gusto, ese gusto que solo el cine de terror puede ofrecer, el que nos acompaña desde la época del hombre primitivo y que hace del terror una experiencia imposible de rechazar.

“No Entres” es una montaña rusa de terror, inteligentemente matizada con un humor tan local como universal. Cardozo se toma su tiempo para presentar a los personajes, permitiendo que el público se encariñe con ellos. Cuando llega el momento de entrar a la casa, todos intuimos que lo peor está por venir. Y los sustos no se hacen esperar. Con una puesta en escena ideal para este subgénero, el director guía inteligentemente la mirada del espectador hacia rincones oscuros, paisajes sugerentes y espacios claustrofóbicos. Tanto la fotografía como el diseño de sonido potencian esta sensación de agobio, y en varios momentos el público se siente abrumado.

El terror de Cardozo: lo implícito asusta más que lo explícito

Lo más destacable de “No Entres” es articular su desarrollo con amplia conciencia que lo que realmente asusta en una buena película de terror es lo que se oculta en la oscuridad, no lo explícito de la matanza.

En “No Entres” no hay nada explícito; todo se presenta de manera brutal pero dosificada. No hay regodeo. Las imágenes tenebrosas duran apenas segundos, y la persistencia retiniana hace el resto, sumada a la sugestión que el director hábilmente genera en sus espectadores desde el momento en que los personajes atraviesan la medianera de la imponente edificación.

Cardozo es, sin duda, un director convencido de la potencia de sus imágenes, y que, paso a paso, eleva el nivel de sus producciones, augurando un largo recorrido internacional para sus nuevas producciones.

“No entres” se mantiene en cartelera por segunda semana consecutiva con proyecciones en Cinemark Paseo La Galería, Villamorra Center, Cines Itaú Pinedo, Cines Multiplaza, Cines Itaú Hiperseis, Cine Fuente, Itaú Cinemapop del Sol, Itaú Cinemapop San Lorenzo, Itaú Cinemapop Mariano e Itaú Cinemapop Cerroalto.

Por: Hernán Moyano

«Milk & Serial», ya disponible en YouTube en el siguiente enlace https://www.youtube.com/watch?v=pbzGQ1lszv4