Luego de alcanzar el 99.47% de las mesas escrutadas Santiago Peña Palacios de 44 años es el nuevo presidente electo de la República del Paraguay al conseguir 1.284.988 votos que representan cerca del 42.73% en el conteo final divulgado por el Sistema de Transmisión de Resultados Preliminares (TREP) del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE).
El candidato colorado emitió el primer discurso luego de que fuera irreversible el resultado que lo mantuvo con comodidad con la ventaja desde los primeros votos contados y que fuera iniciado a las 16:00 con el levantamiento de las primeras mesas habilitadas.
En su discurso emitido luego de asegurar los votos necesarios para declararse como el 52do presidente del Paraguay en el local de la Asociación Nacional Republicana (ANR), Peña agradeció a los miles de paraguayos que entregaron sus sueños y confiaron en este proyecto conciliador y patriótico al depositar en nuestras manos sus esperanzas para que mañana podamos estar mejor, dijo el presidente electo.
A continuación agradeció a sus principales colaboradores del partido iniciando con el presidente del Partido Colorado Horacio Cartes y en su nombre al partido al cual prometió honrar en toda su gestión. Se dirigió al titular partidario diciendo que admira su obstinación por alcanzar la calidad de la ANR desde aquella vez que lo rescató de la llanura y en esta oportunidad uniendo a la familia colorada y refundarlo al servicio de los hombres libres.
A su vez agradeció a su jefe de campaña José Alberto Alderete, a quien lo calificó como el jefe de campaña más ganador de la historia partidaria a quien agradeció por el trabajo realizado por tercera vez consecutiva.
También agradeció a los apoderados partidarios como Eduardo González, Magnolia Mendoza y Wildo Almirón, en nombre de ellos también a todo el equipo de apoderados y miembros de mesa, gente de logística y centro de cómputos y todo el gran equipo que en la fecha se puso el país al hombro para que esto sea una fiesta democrática.
A su vez, destacó a su eventual rival en las internas coloradas de diciembre y quien colaboró con su gran apoyo en la campaña actual Arnoldo Wiens. Destacó su gran aporte apoyando la campaña dando el ejemplo de la unidad colorada haciendo caso a lo que ambos leyeron y se trató sobre la doctrina colorada por lo que agradeció su gesto.
Aprovechó y agradeció a su compañero de fórmula, Pedro Aliana y aprovechó también para agradecer a su familia, a sus padres, sus hijos y a su esposa Leticia.
Dirigiéndose ahora sí a todos los paraguayos, prometió desterrar el fatalismo de que estamos condenados a nuestro presente, recordando de que los paraguayos somos dueños de nuestro propio destino, futuro y porvenir. Prometió no defraudar el sacrificio de los correligionarios que fueron los puntales de la voluntad popular y cuidaron cada voto para que se respete a rajatabla la libre decisión del soberano.
Al final termino diciendo infinitas gracias por el esfuerzo y dedicación de todos. Hoy no están celebrando un triunfo personal, por el contrario se están festejando la victoria de un pueblo que con su voto eligieron el camino de la paz social, del diálogo de la fraternidad y de la reconciliación nacional de un pueblo, que envió un claro mensaje de que los agravios, el odio y las rencillas no son el camino.
A los paraguayos que creyeron en otros proyectos, dijo que fuera de los colores partidarios que levantan falsas murallas, les recordó que somos hijos e hijas de una madre en común y es la patria paraguaya, la cual reclama lo mejor de cada uno de nosotros y en esa gran empresa nacional, todos estamos moralmente obligados en ejercer un papel.
Finalmente dijo que desde mañana van a diseñar el Paraguay que todos queremos, sin groseras desigualdades ni injusta asimetrías sociales, tenemos muchas cosas por hacer. Después de varios años de estancamiento económicos, de déficit fiscal, de alto índice de desocupación y el aumento de la pobreza extrema, la tarea que nos espera no es para una sola persona o sólo para un partido.
Convoco a la unidad y al consenso para alcanzar nuestro destino de bienestar colectivo para llegar a la prosperidad sin exclusión. Llegó el tiempo de postergar nuestras diferencias para priorizar las causas comunes que nos unen como nación. Ante todo y sobre todo somos paraguayos y ese tiene que ser el único distintivo que nos identifique como protagonistas de este gran proyecto de esta restauración moral, de recuperación económica de crecimiento inclusivo y justicia social.
Terminó su discurso vitoreando al Paraguay y al partido como es acostumbrado en las reuniones de la ANR.