La bajante continuada de los ríos Paraguay y Paraná ya genera crisis de navegabilidad en nuestro país. El Estado dio un aviso a todos los sectores navieros al respecto y navegar por estos cauces hídricos quedan bajo exclusiva responsabilidad de los empresarios de transporte fluvial.
El hecho fue advertido hoy por Luis Jara, jefe del departamento de Navegación de Hidrografía de la Comisión Mixta Paraguayo-Argentina del Río Paraná. Señaló que hay tramos donde las grandes barcos solamente pueden cruzar con el 60% de sus capacidad de carga, porque se cuenta con un calado de sólo 7 pies. Quedarse varado en el camino es el riesgo que asumen los navieros, acotó.
El especialista indicó que los trabajos de dragados se realizan constantemente, pero no son suficientes porque la sequía supera todo proyecto. Entonces, navegar ahora por esos ríos es una aventura, informó Jara que habló a través de Radio 1000am de Asunción.
No obstante, dijo que mediante el trabajo constante de dragado se está logrando activar un buen porcentaje de la navegación. “En el río Paraguay, en la zona norte, la Prefectura Naval es la que determina los niveles permitidos y, actualmente, se dispone de un calado de apenas 7 pies, sería algo así como el 60 % de la capacidad del transporte de carga. Algunas empresas toman la decisión de no navegar. La situación en el tramo sur, de Asunción para abajo, es diferente: allí sí tenemos mejores condiciones, pero también se están alcanzando los niveles críticos”, resumió el experto en la materia.
Se le consultó si el río Paraná, que es más caudaloso que el rio Paraguay, no podía servir de ayuda al unirse hacia el Sur. Lastimosamente dijo que no. «El río Paraná no ayuda en ningún sentido al río Paraguay; pero se está navegando a pesar de todo con menos agua. Ya no se iba a navegar si no se hacían las profundizaciones correspondientes en pasos difíciles”, explicó.
