El país trasandino logró que su Congreso apruebe una ley para reducir las horas de trabajo a la semana de 45 a 40, la cual deberá ser implementada de manera gradual hasta dentro de cinco años. Con esto, se convierte en el segundo país con menos carga laboral en el continente, al igual que Ecuador.
La ministra de Trabajo Jeannette Jara, celebró que las personas estén más en sus casas y puedan disfrutar más de sus hijos. Con esta nueva Ley se benefician aquellas personas que debían dejar a sus hijos dormidos porque deben salir muy temprano, este es un proyecto que va a contribuir enormemente a nuestra calidad de vida, dijo la ministra.
El mismo proyecto fue aprobado por la Cámara de Diputados, por 127 votos a favor, 14 en contra y tres abstenciones. En principio, el proyecto tuvo gran oposición y varios legisladores inclusive creían que era imposible. Fue la necesidad de tener una mejor calidad de vida lo que ayudó a conseguir los votos necesarios para su aprobación, añadió Jara.
No obstante sólo falta la promulgación o veto del presidente de la República Gabriel Boric para que las horas de trabajo sea implementada gradualmente. Es así que en el plazo de un año la jornada será de 44 horas, disminuirá a 42 en el tercer año de aplicación y a 40 horas luego de cinco años.
Parte de la nueva normativa menciona que los empleadores no podrán recortar las remuneraciones de los trabajadores y ambas partes podrán negociar una semana de cuatro días de trabajo y tres de descanso. Pese a esto, se cree que el 27,3% de los habitantes del país andino no podrá disponer de este beneficio puesto que trabaja dentro de la informalidad.
Gran parte de América Latina aún mantiene las 48 horas laborales a la semana, entre ellos Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay, quienes según la Organización Mundial del Trabajo (OIT), son los países de la región que mantienen las tradicionales horas laborales.