Las Fiscalías de Bolivia y Paraguay compartieron investigación en el caso a Ultranza Py, específicamente siguiendo las pistas de Sebastián Marset, líder de un grupo de narcotraficante que recientemente, a través de un programa de televisión de Uruguay, amenazó con destituir a jueces y fiscales que llevan su caso en nuestro país.
Tanto en Paraguay como en Bolivia y Uruguay investigan a Marset por supuesto narcotráfico. El fiscal general de Bolivia, Juan Lanchipa, recibió a los fiscales paraguayos Deny Yoon Pak y Matilde Moreno en Santa Cruz donde las dos partes se reunieron este miércoles para «compartir información» y para «coordinar investigación» sobre la situación del prófugo, Sebastián Marset, principal buscado en el caso A. Ultranza Py, según informó Lanchipa.
Medios bolivianos divulgaron declaraciones de Lachipa cuando éste admitió que el motivo de la reunión fue coordinar agenda de trabajo rutinario del Ministerio Público para realizar investigaciones del caso Marset.
Las reuniones de coordinación se prepararon luego de la captura de la esposa de Marset en España y se intensificaron después de la amenaza del mismo Marset a jueces y fiscales paraguayos. Además, la Fiscalía de ambos países habían firmado el 14 de junio último un acuerdo de cooperación para investigaciones criminales (foto de Fiscalía de Bolivia).
Lanchipa anunció varias reuniones de coordinación con la Fiscalía paraguaya. “Tenemos previsto, dentro de la agenda de trabajo rutinario del Ministerio Público, llevar adelante investigaciones del caso Marset. En esa investigación, llevamos adelante varias reuniones de coordinación, tenemos una reunión de coordinación con los fiscales que están llevando adelante la investigación en este caso», informó Lanchipa a los periodistas bolivianos, según publicó Red Uno.
La esposa de Marset, Gianina García Troche, fue detenida en España y Paraguay comunicó a las autoridades de ese país europeo que tiene la intención de extraditarlo. Mientras tanto, España lo retiene a Gianina. Despúes había hablado Marset a través de un programa de televisión uruguaya defendiendo la inocencia de su esposa y amenazando a los jueces paraguayos.
“Yo me encargaré con mis abogados de que, mínimo, destituyan de su cargo a la jueza y al fiscal. Mínimo eso, porque la verdad es que les corresponde pagar cárcel por todos los daños que han ocasionado en mi mujer, en mis hijos, por sufrir esta situación, por más de dos años de persecución”, declaró Marset.
Posteriormente, la Corte Suprema de Justicia y la Fiscalía General del Estado de Paraguay ordenaron refuerzo del sistema de seguridad para los jueces y fiscales. Hubo una coordinación con el Ministerio del Interior para llevar a la práctica esta medida.