Existe preocupación de los productores del Chaco Central, por la prolongada falta de lluvias en la zona, que perjudica tanto a los ganaderos como a los agricultores. Algunos dueños de establecimientos manifiestan que el clima les está jugando una mala pasada porque tienen que trasladar sus ganados a otros puntos como medida de precaución.
La producción ganadera y agrícola del Chaco está vinculada, ya que la agricultura es esencial para sostener la producción animal. En mayo se registraron buenas lluvias, pero luego mermaron y la sequía volvió a causar estragos en ambos rubros.
La sequía en el Chaco cumple cinco años y la situación no tiene visos de cambio. En estos tiempos es muy difícil mantener una buena producción, lo que dificulta cumplir con los números planificados. Uno de los productores chaqueños dijo: “Rezamos para que llueva y rogamos porque termine este calvario, que ya lleva mucho tiempo”.
El Chaco continúa siendo una región con mucho potencial, tanto para la agricultura como para la ganadería, pero falta mucha inversión. La falta de infraestructura vial en esta zona es crucial para mejorar la calidad de los productos. Una adecuada red vial facilitaría y mejoraría la eficiencia del transporte de los productos ganaderos y agrícolas, lo que redituaría en una mejora de la economía local.
Contribuir con mejores caminos en el Chaco brindaría a los pobladores mejores opciones de vida, teniendo en cuenta que las rutas de todo tiempo ayudarían a generar nuevas fuentes de trabajo.
Uno de los agricultores chaqueños afectados por la larga sequía sentenció: “Creo que tenemos que mirar con un poco más de cariño a la agricultura en el Chaco central”.
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